Descripción:

Es una planta herbácea y vivaz., muy característica de nuestras campas. Tiene hojas profundamente dentadas, formando una roseta central. Del centro de la roseta salen los tallos huecos en cuyo extremo se encuentran las flores amarillas (una por tallo). Fruto en vilano (los “abuelos” que soplábamos de niños).  Toda la planta contiene un látex blanco.

 Partes utilizadas:

Las hojas y las raíces

Epoca de recolección y conservación

Marzo-mayo es la mejor época para recoger las hojas; se secarán y guardarán en un saquito de tela. Recogeremos las raíces a finales de verano y otoño (hay que tener cuidado al desenterrarlas para no romperlas porque perderán el jugo); deberán guardarse, ya secas, en recipientes herméticos.

Aplicaciones:

Las hojas son un diurético potente y se emplean en infusión para todo tipo de retención de líquidos y edemas. Son también muy nutritivas por su alto contenido en vitaminas A y C y muchos oligoelementos, especialmente potasio.

Las raíces son muy efectivas en el tratamiento de problemas hepáticos y de la vesícula biliar.

Preparación y modo de empleo

Las hojas tiernas y frescas dan sabor a las ensaladas, son un buen tónico primaveral limpiador.

Para la infusión: 1-2 cucharaditas de hojas cortadas en ¼ de litro de agua fria, calentarlo hasta la ebullición y dejarlo hervir un minuto.

Para la decocción, más eficaz para los problemas hepáticos, hacer hervir la raiz durante 15 minutos, taparlo durante otros 10 y colarlo.